Fue en 1964 cuando Alfa Romeo creó un departamento de competición, llamado Autodelta, iniciándose en el Gran Turismo pero que acabaría centrada en crear prototipos y dejar de lado competir con vehículos de serie. Bajo la dirección del excelente ingeniero Carlo Chitti, que venía de Ferrari.
A raíz de los éxitos alcanzados por las Giulia GTA (en la clase Gran Turismo), Alfa Romeo y Autodelta trabajaron en un coche de competición totalmente nuevo que restaurase la antigua reputación de Alfa (esta vez en la clase "Sport Prototipos"). Bajo el código “105.33”, el nuevo coche fue diseñado por el departamento experimental de Alfa, después enviado en 1965 a Autodelta, que lo desarrollaría más a fondo.
Colotti, sobre un chasis formado por tres grandes tubos de aluminio (dos situados longitudinalmente
en los laterales y otro colocado transversalmente en la parte posterior) equipándolo con suspensión
mediante wishbones dobles y frenos de disco Girling en ambos ejes.
Denominado simplemente como "33" hizo su aparición en la temporada 1967, el primer modelo bautizado con el alias de Periscopica, debido a la a la particular toma de aire que se sitúa por encima del habitáculo surgiendo en forma de periscopio de submarino y cuya función es la de alimentar de aire al motor, que fue pronto sustituido por otras versiones legendarias. Debido a toda esta serie de versiones posteriores se le añadió el "-2", indicando su cilindrada de 2 litros, y así poder distinguirlos.
Alfa Romeo 33-2 "Periscopica" (5º 1000 Km Nürburgring 1967)